¿Cual es la diferencia entre Pedir al Banco una Hipoteca o solicitar un Préstamo Personal?
Cuando necesitamos dinero para cubrir una necesidad de financiación para la compra de un bien de consumo o la adquisición de bienes inmuebles, hemos de acudir a un banco o Caja de Ahorros para presentar nuestra solicitud.
Dependiendo del destino del dinero, la entidad nos aconsejará que contratemos un determinado producto que se adapte mejor al importe y plazo de la operación y por supuesto en defensa de sus propios intereses por la seguridad en el cobro del préstamo.
Una vez planteados estos conceptos, pasamos a detallar cuales son las principales ventajas e inconvenientes de contratar una Hipoteca o préstamo hipotecario o préstamo personal.
Solicitar Hipotecas o Préstamos personales
En primer lugar, hemos de aclarar que en ambos casos, se trata de un préstamo con un tipo de interés pactado, un plazo determinado y cuotas mensuales o trimestrales con la única diferencia de la garantía prestada al banco.
Generalmente, está bastante claro que producto elegir en cada momento aunque puede haber casos en que exista la duda por ejemplo cuando se trata de pedir una cantidad importante para devolver en corto plazo:
Cuando pedir una Hipoteca
La principal diferencia entre los préstamos personales y los prestamos hipotecarios es la garantía prestada a favor del banco. Es decir que en el caso de pedir una hipoteca, además de la propia garantía personal del solicitante que responde con todos sus bienes e ingresos presentes y futuros, se aporta un bien real (vivienda o local) que queda inscrito con una carga en el Registro de la Propiedad.
Los préstamos instrumentados en hipoteca se utilizan con mayor frecuencia en operaciones de mayor importe y de vencimientos a largo plazo donde el riesgo sería mayor para la entidad bancaria.
El tipo de interés de los préstamos hipotecarios suelen ser inferior a los créditos y préstamos personales dado que tienen mayor garantía y son inversiones a largo plazo. No obstante, el tipo de interés suele ser a tipo variable para reducir riesgos de cambios en la rentabilidad a lo largo de los años.
Por este motivo, el préstamo hipotecario está siempre ligado a la compra de una vivienda o local aunque se suele utilizar esta opción para otros fines como reunificar deudas, garantizar otras deudas, etc. donde el banco exige mayores garantías. No obstante, es posible comprar una vivienda con un préstamo personal siempre que el banco acepte prestar el dinero sin constituir garantía hipotecaria.
Cuando Pedir Préstamo Personales
Los préstamos personales sin garantía hipotecaria se emplean generalmente en la compra de bienes de consumos y servicios y por tanto, suelen tener un importe y un plazo máximo.
La cantidad máxima que un banco estará dispuesto a prestar como crédito personal dependerá de la solvencia y de los ingresos del solicitante y el plazo suele estar limitado a los 10 años.
El destino del dinero más habitual para los préstamos personales es por ejemplo la compra de un coche, adquisición de muebles, reformas del hogar, viajes y ocio, etc.
Los tipos de interés que se aplican en los préstamos personales son superiores a las hipotecas y casí siempre se trata de interés a tipo fijo durante toda la vida del préstamo. No obstante, hay entidades que ofrecen interés a tipo variable.
En el caso de los préstamos personales además de pedir el dinero en bancos y Cajas de ahorro, en la actualidad también se puede solicitar el crédito en Financieras Online que operan en internet como es el caso de Credito Cajero Online que ofrecen Créditos Rápidos Online para necesidades urgentes que surgen de forma imprevista como puede ser la avería de un electrodoméstico, reparación de un automovil, gastos de estudios, etc y Préstamos para Reformas de sencilla tramitación sin papeleo y con respuesta inmediata. Si su crédito resulta aprobado cobrará el dinero al instante.
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